Empezamos el año entrenando fuerte, tanto Sabrina como Manchita. Este año el calor de enero fue TERRIBLE, casi no llovió en todo el verano, hacía años que no se producía una sequía tan grande... asi que los entrenamientos tienen que ser sí o sí por la noche, imposible exponerse a este sol, es un peligro. Pero entonces, cae la luz del día...¡y arranca el Agility!. El Agility es como la avenida Corrientes: ¡NUNCA DUERME!
Y prueba de ello es esta foto de Sabrina durmiendo desplomada en la noche del domingo después de un fin de semana (viernes y domingo) a todo agility: